O cómo tener que traicionar tus principios si quieres salvar a tu familia.

Dave Evans es un reconocido neurocirujano que ha de decidir entre si el próximo paciente que ha de operar ha de salir vivo o de su sala de operaciones para que su hija sea liberada del secuestrador que quiere a este paciente muerto, este paciente que es el Presidente de los Estados Unidos …

Una historia que envuelve varias historias, contadas con esta maestría, con capítulos cortos, sin mucha palabrería que hace que te aburras, la justa para colocarte en el lugar y posición en la que te quiere ubicar, a veces para darte con el estoque, a veces para que sólo seas espectador o a veces para que sonrías tristemente en los amargos recuerdos de los personajes.

Unos personajes descritos por los otros protagonistas del libro de forma justa, breve y efectiva, mientras la acción no para de desarrollarse ni un maldito segundo.

Tramas que te aboserven, te atrapan, te retuercen, te machacan, su crudeza a veces hacen que pares y asimiles, su encrucijada, la tensión, las antipatías, el miedo, ese sudor frío de estar a punto, dilemas morales no criticables porque en su situación a ver quién no actúa igual…

Una vez más, recomendable 200%, dedícate una tarde a retorcerte de dolor y dilemas con el Doctor Evans.