Gary Johnson és l’assassí professional més buscat de Nova Orleans. Per als seus clients és com un personatge sortit d’una pel·lícula: un misteriós pistoler a sou. Però qui el contracti per eliminar un cònjuge infidel o un cap abusiu, serà millor que es cuidi bé l’esquena: en realitat, Gary treballa per a la policia.
El siempre versátil Richard Linklater nos trae con Hit Man una historia que, aunque parece salida de la imaginación de Hollywood, está basada en la increíble historia real de Gary Johnson, un hombre que, durante los años 80 y 90, se hizo pasar por asesino a sueldo para ayudar a la policía de Houston a realizar más de 60 arrestos.
A diferencia de los thrillers convencionales sobre asesinos a sueldo, Linklater opta por su sello característico: un enfoque más introspectivo y lleno de matices, donde el verdadero motor de la historia no es la acción, sino la exploración de la identidad, la moral y las consecuencias de vivir una mentira.
El guion consigue equilibrar humor y tensión, logrando que el espectador se involucre en el personaje de Johnson y en las múltiples identidades que adopta para engañar a criminales.
La película juega con la idea de cuánto de esas falsas identidades terminan por convertirse en parte de su verdadera personalidad, planteando una pregunta fascinante: ¿hasta qué punto podemos fingir ser alguien sin terminar convirtiéndonos en ello?
A nivel técnico, Hit Man es precisa y elegante, con una narrativa fluida que mantiene el ritmo sin caer en los clichés del género. La actuación principal es clave, y el carisma del protagonista hace que su transformación sea creíble y atrapante.
Lamentablemente, Gary Johnson falleció poco antes de que la película fuera terminada, lo que le añade un peso emocional extra a la historia. Su trabajo encubierto fue fundamental para la policía de Houston, y esta película, además de entretener, sirve como homenaje a una figura real cuya historia merece ser contada.
No esperas un thriller de acción clásico, lo que hayas demás que siendo de acción también son muy divertidas.