Aunque hemos visto muchas películas con un argumento calcado, Hunted es una más, pero eso no la convierte ni en una mala película ni en una mala historia, porque como siempre no importa la historia sino cómo se cuenta, y este es el caso, sin duda de este film.
Cuando Eve conoce a un chico en un bar, poco se espera lo que va a suceder esa noche. En realidad, se ha cruzado con un psicópata (y su muñeco), con el que se enzarza en una persecución nocturna y violenta. En medio del bosque, esta singular caperucita roja hará lo que sea para librarse de su particular lobo feroz. Vincent Paronnaud parte del cuento para alcanzar la pesadilla.
Su visionado transcurre entre un villano peculiar y un abuso de clichés cinematográficos pero no por ello, se convierte en un film que ha de ser visto con amigos para comentar los momentos gores y la violencia con toques de humos negro.
Aunque cumplió sobradamente su cometido, que fue la de divertir y hacer chillar al público, incluso aplaudir en algún momento, creo que difícilmente va a ser un film que tenga un largo recorrido, ya que no tiene nada tan especial como para ser recordada por guión, (NO) ni por su calidad interpretativa (ni mucho menos). Y si tenemos que comentar el final… ese final… no, decididamente no creo que llegue a muchas salas.