Una maravilla en la 6ª edición del Barcelona Film Festival, narrada casi en clave de cuento, lleno de inspiración, amor, respeto y apoyo, donde perseguir tus sueños es más grande que triunfar.
Mark Rylance da vida a Maurice Gerard Flitcroft, un humilde y respetado trabajador de los astilleros, bueno, humilde, sencillo y enamoradísimo de su familia, pero los astilleros se nacionalizan, ase pierden empleos y con más de 50 años, dónde se podría encontrar trabajo… pues es mejor perseguir tu sueño, ser golfista profesional y jugar en el Open de Golf de 1976, y esta es su aventura, practicando en parques, playas, colándose en clubs de golf, y robando ropa para poder participar en un torneo profesional muy alejado de sus posibilidades… pero eso no es lo importante
Además de tan emblemático actor, el reparto lo forman por Sally Hawkins, Rhys Iran’s, Mark Lewis Jones, Johann Myers, Johan Lees, Christian Lees y Barry Aird, entre otras caras conocidas.
Craig Roberts nos trae una preciosa historia, sorprendentemente basada en hechos reales, mientras ríes por lo que sucede, se te va cayendo la lagrimilla y se te encoge el corazón, donde sales con una sonrisa y un suspiro por el la lágrima contenida.
Un film, con una gran dosis de buen hacer, sin maldad, lleno de buenos y crueles, de cuando las clases sociales se quieren diferenciar, de que la familia siempre, siempre estará, una familia que fomenta el seguir de los sueños, de perseguir tus deseos y así bailar alrededor del mundo.
Una cita indispensable para este festival, y si se emite en plataformas de contenido digital (vamos lo que viene siendo NEtflix, HBO, etc…) no dudéis ni un segundo en verla: