Valeria lleva tiempo intentando tener un hijo. De repente, la misma noche en la que por fin se confirma su embarazo le visita una extraña presencia está esperando su primera criatura: su humor va cambiando, unas visiones oscuras emergen y todo parece obra y arte de un ente maldito llamado “la huesera”. La monstruosa criatura le persigue manteniendo en peligro su embarazo, su pareja y la vida de su futuro bebé por lo que sus relaciones familiares se irán debilitando, a la vez que ella se introduce en la magia negra.
Huesera se adentra en la maternidad a partir de una propuesta estéticamente desbordante e inquietante.

La directora Michelle Garza consiguió una beca para ir a estudiar al Reino Unido. Tras dirigir diversos cortos, este es su primer largo: Huesera.

Y es que es complicado hablar de la maternidad desde el punto de visa femenino, que alcance a todo el mundo lo que quieres transmitir, sin caer en discursos manidos enfatizados por el terror.

Pero a este film hay que añadirle que además cuenta con un tema delicado que es el de que no toda mujer quiere ser madre una vez que lo es, y eso amigos, siempre genera controversia.

Un film con buenos sustos, y además que la protagonista esté embarazada siempre da una aprensión diferente y vuelve más vulnerable al personaje, por lo que el espectador lo sufre más.

Pero lo que podríamos llamar el enfrentamiento final, me pareció muy flojo o es que estaba tan lleno de metáforas que no supe entender demasiado.

Pero en general es un film muy bien rodado, con escenas de dolor y contrición del rictus, así como muy festivalera: