¿Hay alguien que pueda desviarse del camino decidido previamente por su destino? Cuando un adivino trastocado se topa con un psicópata que pronto cometerá un asesinato, el primero utilizará todos los trucos del feng shui y la metafísica para cambiar el futuro.

⭐️⭐️

La película coreana me cautivó al principio, con una sinopsis que parecía que su trama era intrigante y original. La idea central es fresca y enrevesada, tal como se esperaría de una mente asiática creativa. Las interpretaciones están muy creíbles y muy correctas, los actores logran dar vida a sus personajes con gran maestría.

Sin embargo, a medida que avanza la trama, la película comienza a enrarecerse. Lo que inicialmente parecía una narrativa prometedora y emocionante se va complicando de manera excesiva. La complejidad de la trama, aunque interesante, llega a un punto en el que se vuelve confusa y, en ocasiones, incluso aburrida. La historia parece perderse en su propia ambición, desdibujando la línea de lo comprensible y lo disfrutable.

Aunque «Mad Fate» tiene una idea innovadora y un reparto que hace que el espectador sufra en ocasiones, su trama enrevesada puede resultar agotadora y poco clara, haciendo que la película pierda parte de su impacto inicial.

A pesar de sus altibajos, sigue siendo una muestra interesante del cine coreano y vale la pena verla, aunque solo sea por su originalidad.