Dos estadounidenses acaban en Dakar, Senegal, con bombas atadas al pecho y diez horas para averiguar por qué.
⭐️⭐️⭐️
Acción Desenfrenada en Clave Festiva
Si hay algo que “Zero”, la última película de Jean Luc Herbulot, sabe hacer bien es entregarse al espectáculo. Desde el primer minuto, la película te lanza a una montaña rusa de violencia y sangre que no se detiene hasta el final, y lo hace con una actitud que abraza el caos. Es una cinta diseñada para disfrutar sin preocuparse por la coherencia narrativa o los agujeros en la trama, porque al final, eso es lo que menos importa cuando lo que se busca es una fiesta audiovisual de acción y peleas.
Personajes y Estética: Acción en Modo AliExpress
Los personajes de “Zero” no pueden evitar recordarnos a versiones descafeinadas de íconos del cine de acción como Kurt Russell en Escape from New York, Bud Spencer, o incluso John Cena. Personajes exagerados, casi caricaturescos, que encajan perfectamente en la estética de acción exagerada que Herbulot ha creado. Si bien algunos podrían criticarlos por parecer versiones “AliExpress” de sus contrapartes más famosas, para los fans del género, esta referencia desenfadada añade un toque de humor y una sensación de familiaridad irresistible.
Lo que podría ser una debilidad en otro tipo de películas, aquí se convierte en una ventaja. La falta de profundidad de los personajes y su similitud con figuras icónicas del cine de acción no resta atractivo a la cinta, sino que le da un aire auto-paródico que resulta entretenido. Estos héroes de saldo funcionan porque no pretenden ser nada más que lo que son: meras excusas para desatar secuencias de pelea llenas de golpes, disparos y explosiones.
Un Guion Lleno de Agujeros, pero con Estilo
Los agujeros en el guion son evidentes. La trama avanza por saltos, y las decisiones de los personajes a menudo no tienen mucho sentido si uno se detiene a analizarlas demasiado. Sin embargo, la película está tan centrada en la acción y en mantener un ritmo frenético, que poco importa la coherencia. El espectador está tan inmerso en las secuencias de violencia y en la atmósfera festiva de destrucción, que el guion queda relegado a un segundo plano.
“Zero” es una excusa para liberar adrenalina y disfrutar de lo que realmente importa: la coreografía de los combates y la espectacularidad de sus escenas más brutales.
Uno de los mayores logros de “Zero” es su capacidad para mantener al espectador pegado a la pantalla de principio a fin. Desde el momento en que empieza, la película no te deja respirar. Las secuencias de acción están meticulosamente construidas para que no haya un momento de descanso, lo que convierte a “Zero” en un auténtico festival de adrenalina.
Si eres amante de las películas que no pierden el tiempo en largas explicaciones o desarrollo de personajes y van directamente al grano, “Zero” será una experiencia más que satisfactoria.
Un Final que Deja con Ganas de Más
El final de “Zero” no solo cumple con las expectativas, sino que además prepara el terreno para una posible saga. Si se llega a rodar una secuela, es probable que siga la misma línea de acción desenfrenada y personajes caricaturescos, y los fans del film no podrían estar más contentos con esa idea.
El cierre invita a pensar en un universo expandido que, aunque sigue siendo absurdo, podría profundizar en las locuras que este primer film apenas roza. Ojalá Herbulot y su equipo no tarden mucho en volver a la carga.
“Zero” no es una película para aquellos que buscan un guion inteligente o personajes complejos. Tampoco es una obra maestra del cine de acción, pero ese no es su objetivo. Herbulot ha creado un film que celebra la violencia y el caos de una forma tan festiva que resulta imposible no disfrutarlo. Los fans del género encontrarán en “Zero” todo lo que podrían desear: peleas bien coreografiadas, personajes caricaturescos y una atmósfera que no deja respirar.
A pesar de sus defectos, la película tiene un encanto innegable, y su tono despreocupado la convierte en una experiencia tremendamente entretenida. Para aquellos que solo buscan pasar un buen rato entre explosiones y combates, “Zero” es justo lo que recetó el doctor.