O cómo erradicar la violencia con toneladas de ella.
A finales de los 80, el detective Ogami Shogo de la Policía de Hiroshima, junto a su compañero Hioka Shuichi, recién salido de la academia y con íntegros principios, han de investigar la desaparición de un empleado de la Administración, sospechosamente ligado a la Yakuza, y también una desaparición con claros signos de haber sido ellos mismos los encargados de hacer desaparecer al pobre desgraciado. Pero mientras se desarrolla la investigación, Hioka cree que Ogami esconde su colaboración con la Yakuza..
Un film altamente violento, con poca censura, lleno de acción, violencia y sangre, al más puro estilo oriental en cintas de ésta índole, con escenas que a veces te hacen girar la cara por lo que la bestialidad que sabes que va a suceder.
Grandes actores del género dan cabida en esta cinta, como Yakusho Koji, Renji Ishibashi.
Una cinta que vale la pena verla, ya que como buena película de género, tiene pasión, sentimiento, orgullo y ese giro inesperado que sólo ellos saben dar,