O cómo tu amargo pasado pesa aún en tu vida, condicionándote en todas las relaciones humanas que puedas tener con otros, pero también te pueden salvar.
Joe, es un ex marine con un trabajo algo diferente, salvar a gente secuestrada, con unos métodos libres de cuestión: crueles, violentos y sin pestañear. Pero Joe hace todo esto para intentar canalizar su traumático pasado, en el ejército, de su niñez…. Contacta con él el senador Votto, su hija ha desaparecido, y tiene una dirección donde podría estar, un edificio entero de proxenetas infantiles de alto standing, por favor ha de recuperarla, como sea y con la violencia que considere necesaria, incluso cuanta más mejor, pero hay secretos que descubrirlos supondrá poner en peligro su vida.
Una película maravillosa.
Aunque la descubrí tarde, la he disfrutado y sufrido a partes iguales y tantas sensaciones, creo que hacen de ella un film de obligado visionado.
Su puesta en escena es increíble, has de tener un alma igual de torturada que el protagonista, la historia que le traumatizó de pequeño con los excesos de su padre, su vida en el ejército, lo que vió, su sentido de la culpabilidad, su hermetismo emocional, sólo con su madre se muestra cariñoso, amable y se desprende de su armadura, pero no deja de llevar la losa de la culpa y el no poder más en toda su vida, y todo siempre es interferido por ese pasado, imágenes que le interfieren en el presente.
Las imágenes y composiciones que sugieren sin explicar explícitamente, sin que se desvele nada en concreto pero te haces la idea de lo que pasó, son de un gran gusto, de una composición estudiada en plano y unos colores que anidan muchísimo en la transmisión de lo que quiere transmitir en cada momento: la imagen de él sumergiéndose en el río cargando el cuerpo de su madre bajo una luz cenital… esa composición de La Piedad de Miguel Ángel al estilo del director…. sublime.
Sin duda alguna, el camaleónico y adaptable actor, Joaquin Phoenix, interpreta y desarrolla un papel difícil de interpretar, pero a la vez le va como anillo al dedo, un personae, traumatizado y que vive por inercia pero está cargado de culpa, transmite una rudez y una pena inmensa, transmite una rotura de alma espectacular.
Todas las imágenes en las que fantasea en acabar con todo, en poner fin a sus remordimientos y penas, una obra visual.
Y el papel de la hija del senador, impresionante, lo rota que está, que la han roto, le han destrozado su corta vida y le han transformado en un Joe en potencia.
He de decir que cuando se descubre la verdad, me indigné muchísimo, sólo con 2 cortas frases que descubre la realidad de tal degenerados, me impactó a la par que indignó, me dejó conmocionada cómo el poder es capaz de manipular y mover las piezas a su antojo, matar a gente por algo tan asqueroso y falta de humanidad como la verdad de la historia.
Me gustó la simbología cuando él se dispara, como que ha acabado una etapa y Félix resurge de sus cenizas para poder empezar de nuevo con la criatura. Un detallado el querer darle esa segunda oportunidad que se merecía.
La recomiendo muchísimo, una obra lentamente violenta y una espiral de emociones contenidas que se liberan poco a poco hasta que se desbordan.